
Una buena alternativa energética
El coprocesamiento es una buena alternativa energética que convierte residuos en combustible alterno para hornos de cemento.
Como contribuyente a una economía circular, el coprocesamiento da nueva vida a los residuos. En vez de acumularse en miles de industrias y poblaciones, se usan para crear energía. De esta forma, los residuos forman parte de un ciclo sustentable a la vez que se reduce la dependencia en combustibles fósiles.
Coprocesamiento en méxico y el mundo
En México, el coprocesamiento está reconocido en la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de Residuos. Se define como la integración ambientalmente segura de los residuos generados por una industria o fuente conocida, como insumo a otro proceso productivo. Además, contribuye a disminuir el uso de combustibles derivados del petróleo y reduce las emisiones de bióxido de carbono (CO2).
Varios organismos internacionales y nacionales ven el coprocesamiento como un método de gestión de residuos seguro y racional. Entre ellos están:
- La SEMARNAT en México
- SINTEF en Noruega
- GIZ en Alemania y
- ADEME en Francia
Es importante mencionar que no todos los residuos pueden ser coprocesados. Por ejemplo, las empresas líderes en el sector no reciben restos radioactivos, biológico-infecciosos, explosivos o de asbestos. Además, se requieren una variedad de permisos y certificaciones para realizar el proceso de manera segura y efectiva.